730 días con sus 730 noches. Veinticuato meses. Dos añitos. Parecen pocos, son pocos en la vida de un país, aunque a veces dan para mucho. O para poco, para muy poco.
En las elecciones del 2008, éramos unos carcas, pesimistas y malos agoreros, aquellos que creíamos en la verdad y la cercanía de la crisis. La palabra crisis estaba fuera de cualquier conversación progre, y quedaba arrinconada a aquellos "rancios" y "retógrados".
El tiempo es terco y tiende siempre a dar la razón al que la lleva.
Por activa y por pasiva he creído, y sigo creyendo, he hablado, y sigo hablando, que Zapatero no es más que un inepto que los poderes fácticos y las mentiras burdas y con precisión de relojero administradas lo han puesto en un lugar que no hubiese soñado nunca.
En dos añitos hemos pasado del "pleno empleo" al 18,8% de tasa de paro ( en "Andazulía" el 26% ). Me imagino, en mi calle a una de cada cuatro casas en ruina. Esto es lo que tenemos.
Aún hay voces altisonantes que no quieren ver lo que tienen delante de sus ojos. Aún hay quien cree que somos tontos y nos creemos aquello de que la culpa de los problemas de España, y de Andalucía mayores, son del exterior. Claro, amigo, por eso los demás países saldrán de la crisis con DOS AÑITOS de ventaja sobre el nuestro. Porque Zapatero ha hecho los deberes maravillosamente.
Dos añitos es lo que ha tardado este señor en bilipendiar el fondo de pensiones que el aterrador gobierno Aznar le dejó- Ayyy, si no fuera por el fondo de pensiones- . Volvemos en estos días a un debate que ya viví, estando en el gobierno Felipe González allá por el año 1993, y que lo llevó a la pérdida del poder, a él y al PSOE (por Dios, que a nadie se le ocurra comparar a un presidente como González con un hazmereir cómo éste ).
Dos añitos más de curro obligado. Sí, así es. Currando hasta los 67 por cojones, para que ellos ( los políticos ), sigan cobrando tras haber dejado los cargos un inmoral sueldo vitalicio - aunque hayan sido días los que se haya ocupado de tal menester -. Ésta es la izquierda señores, un gobierno de izquierdas, y un huevo.
Zapatero está dispuesto a engañar, mentir, sonreir - eso sí -, chafardear y muchas más cosas indecentes con tal de conseguir embelesarnos y embaucarnos, falazmente, con el único fin de perpetuarse otros años en el poder.
Dos añitos faltan, igualmente para las próximas elecciones. Sólo dos, o eternamente dos. Según se mire.
Usted, Sr. Zapatero, y sus azláteres, son obscenos con el pueblo. Usted Sr. Zapatero, y sus azláteres, son mentirosos compulsivos y de malas artes. Ustedes han jugado con la sensibilidad obrera para enriquecerse asquerosamente sus bolsillos sin límite.
En dos añitos, ha subido el paro hasta límites nunca vistos, más de 4 millones. ¿ Sabemos lo que supone eso ?. La ciudad de Madrid entera parada, con sus pueblos y su provincia, enterita. En dos añitos, ha conseguido usted entrevistarse, en la galaxia, con Obama, pero también ha conseguido que tardemos dos añitos más que el resto del mundo en crecer. En dos añitos, ha conseguido dividir a España en dos. En dos añitos ha conseguido reabrir un debate que quedó cerrado con el Pacto de Toledo, allá por el 96. Todo ésto en dos añitos.
Si Aznar hubiera propuesto tal medida, los sindicatos se le hubieran tirado al cuello cual doberman enfurecido, el PSOE hubiera lanzado a sus militantes a la calle a golpe de pancarta. Huelga general justificada que yo apoyaría sin tapujos. ¿Dónde están los sindicatos?. Inclinados y puestos en rodilla ante el "todopoderoso" ZP. Hacen un uso miserable de los ingresos que le inyectamos.
Resumiendo. Nosotros, los obreros, los trabajadores, la clase media y baja española, tendremos que pagar con creces los desajustes y barbaridades cometidas por un incompetente que, por error, desgobierna España.
Ahora me tacharan de derechas. Si ampliar hasta a los 67 años la edad de jubilación, llevar a un país al casi el 20% de tasa de paro, enriquecer a los bancos, dilapidar la clase media, subir los impuestos, coartar libertades y tener un crecimiento negativo es de izquierdas. Igual es que soy de derechas. Aunque siempre creí que la izquierda era todo lo contrario.
Dos añitos nos quedan para darle una patada en las urnas a este ilusionista y demagogo, que por arte de birlibirloque está en La Moncloa, y lo mandemos a donde merece. A su casa.